Transahariano 2007
2. De ESPAÑA a ÁFRICA
El 6 de Enero de 2007, hace ahora 15 años, el más famoso de
los rallys de aventura comenzaba en Portugal. Ese año el renombrado LISBOA -
DAKAR sería el último de aquellos originales Dakar que se iba a celebrar en
África hasta el día de hoy, y todo ello por una creciente amenaza terrorista en
el Magreb y región sahariana que ya daría al traste con algunas etapas en ese
año 2007.
Con poca experiencia, pero con muchas ganas de hacer toda
una desértica travesía por África, yo partía en solitario y en mi coche el día
3 desde mi Gijón de residencia, para tras afrontar lo quizá más difícil de
aquel largo viaje que no era otra cosa que separarme unos meses de mi otra
querida media parte, buscaba unirme a la gran caravana del Dakar para así tener
más certeza al intentar cruzar el Sáhara y más tarde llegar a las lejanas
costas del Golfo de Guinea.
Tras pasar ese mismo día antes de partir por el centro de
vacunación de Sanidad Exterior en Gijón a ponerme últimas vacunas, me disponía
a cruzar la península en un par de jornadas, y así después, cruzar en ferry a
esa ya varias veces viajada y querida África.
Había equipado la parte trasera de mi Land Rover con una
pequeña cama colchoneta, metido varios bidones para gasoil y preparado pequeña
despensa con latas y algo de comida envasada para algunos días que no hubiera
donde comprar nada en viaje.
Al llegar a Madrid, recogería unos curiosos mapas
topográficos rusos del desierto del Sáhara que tenía encargados así como un
rudimentario GPS que podía conectar a mí pequeño pc, para saber de vez en
cuando por donde andaría una vez inmerso de lleno en el desierto. Pero lo que
al final más veces utilizaría para orientarme en aquel viaje africano , sería
una sencilla brujula que llevaba en mi reloj.
Habiendo ido también unas semanas atrás a Barcelona a por
último visado en el consulado marfileño, por si podía cruzar una inestable, de
aquella, Costa de Marfil, mi otra rudimentaria gran arma era un curioso mapa
del Sáhara que conseguía encontrar en la catalana Librería Altair con los pocos
lugares donde supuestamente se podía encontrar gasoil en ese gran desierto para
cuando lo cruzara por Mauritania.
Parada a dormir primera noche dentro del coche en
Valdepeñas, para al día siguiente llegar a Algeciras dejando el guapo y
montañoso paso de Despeñaperros por el camino, y comprando en el gaditano
puerto, pasaje para mí y mi coche a Tánger.
Sería ya al otro día muy temprano cuando tomaría el ferry
que me volvía a llevar a mi querida África, esta vez para una aventura un poco
incierta, pero que una vez de vuelta, se convertiría en uno de los viajes más
recordados hasta hoy en día.
20 años atrás, como también atestiguan un par de fotos que
os adjunto en ByN, tomaba ese mismo ferry para llegar por primera vez a
Marruecos y dormir en la cercana ciudad costera de Asilah, por la cual pasaría
de nuevo en esta ocasión viendo sus muchos dromedarios en la playa, y
recordando con cierta nostalgia aquel primer viaje africano de 1988, camino
ahora del antiguo protectorado de Larache a Rabat.
Como os había prometido la semana pasada, os sigo contando
un poco cada día de este ahora rememorado viaje Transahariano de 2007, en el
que efectivamente conseguiría después unirme a esa caravana del Rally Dakar y
donde nuevos conocidos amigos me ayudarían, y mucho, a poder cruzar esas arenas
del guapo e impresionante desierto mauritano.
Os seguiré contando.
Buena semana Friends!
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